Desde mi punto de vista, unos de los mayores problemas a los que se enfrenta la industria de la moda son los residuos de plástico. En las últimas décadas la industria de la moda ha ido introduciendo cada vez más y más plásticos en nuestra ropa. La seda ha sido sustituida por el poliéster, el algodón por el nylon y ha habido un gran aumento de las prendas hechas de mezcla de fibras, naturales y sintéticas. La razón por la que la industria lo hace, es porque los materiales procedentes del petróleo son más baratos que los naturales.
Algunas personas defienden que parte de la ropa producida con materiales plásticos se puede reciclar y que el producto reciclado tiene menor carbon footprint que los textiles naturales. Pero la realidad es que en la mayoría de los casos la ropa no se recicla y en el caso de la mezcla de fibras, ni siquiera se puede! Actualmente no existe la tecnología que pueda separar una fibra de otra. Así que todo este plástico termina en el basurero, donde puede tardar hasta 1.000 años en degradarse. Lo bueno de utilizar fibras naturales, como la seda, algodón, lana o lino es que son biodegradables. Además soy de la creencia de que tener productos de plástico en contacto con su piel, por cierto el órgano más grande de nuestro cuerpo, tiene que tener consecuencias negativas, aunque la ciencia aún no lo haya demostrado.
Hoy todo mi look está compuesto de fibras naturales con una camisa de seda vintage, vaqueros de algodón (estoy tratando de evitar pantalones vaqueros que combinen algodón con elastano), zapatos y bolso de piel.
Imágenes: Beatriz Lozano
Camisa – Seattle Vintage Store | Vaqueros – Levi’s | Zapatos – Camper + Veronique Branquinho | Bolso – Muestrarios
